El Director General de Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía destaca el carácter piloto y la utilidad práctica del proyecto para la futura planificación urbanística sostenible y la integración de los nuevos pobladores en comarcas rurales andaluzas limítrofes a áreas metropolitanas
El Director General de Desarrollo Sostenible en el Medio Rural, José Luís Sánchez Teruel, y el Presidente de la Asociación para el Desarrollo Aljarafe-Doñana (ADAD), Rafael Moreno Segura, han presentado esta mañana en Sevilla los resultados del proyecto de cooperación regional “Integración de los nuevos pobladores en las zonas rurales afectadas por las áreas metropolitanas”, financiado por la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía.
Coordinado por ADAD y participado por siete Grupos de Desarrollo Rural (GDR) con territorio limítrofe a zonas metropolitanas de Huelva, Granada, Málaga y Sevilla, ha analizado desde un punto de vista multidisciplinar y científico cómo está afectando urbanística y sociológicamente la presión que ejercen estas áreas metropolitanas en las comarcas rurales andaluzas del Aljarafe-Doñana, Gran Vega y Corredor de la Plata, en Sevilla, la Axarquía en Málaga, Alfanevada y Promovega en Granada, y el Condado-Campiña, en Huelva.
Según el Director General de Desarrollo Sostenible en el Medio Rural, José Luís Sánchez Teruel, el proyecto “Nuevos Pobladores”, del que destacó su carácter piloto, “aborda los cambios que se están produciendo en las zonas rurales afectadas por las áreas metropolitanas, logrando dos objetivos principales; ayudar a establecer pautas y políticas para que la expansión urbanística sea sostenible y proteger la identidad rural y la cohesión social de las comarcas”.
En este mismo sentido incidió el Presidente de ADAD, Rafael Moreno, durante su intervención, indicando que el estudio pone a disposición de los gestores públicos del medio rural una herramienta de trabajo y una serie de propuestas que van a facilitar en el futuro una planificación urbananística más sostenible y una mejor integración de los nuevos vecinos.
El proyecto “Integración de los nuevos pobladores en las zonas rurales afectadas por las áreas metropolitanas” es fruto del trabajo de investigación que han realizado de forma conjunta en cada territorio la Fundación de Investigación de la Universidad de Sevilla, la Universidad Pablo de Olavide y el Aula Eileen Gray del Colegio de Arquitectos de Córdoba.
Estos equipos han estudiado los efectos urbanísticos y sociales que las áreas metropolitanas están produciendo en estas zonas rurales, teniendo en cuenta la perspectiva de género, y las fórmulas más efectivas para armonizar la integración de los nuevos vecinos en las sociedades de acogida, así como una planificación urbanística más sostenible e integradora.
La Fundación de Investigación de la Universidad de Sevilla (FIUS), a través del profesor Jorge Benavides Solís, ha llevado a cabo un análisis urbanístico de las distintas comarcas, que ha sido abordado desde la perspectiva de género por el Aula Eileen Gray del Colegio de Arquitectos de Córdoba. Asimismo, el Grupo de Investigación Social y Acción Participativa (GISAP) de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, dirigido por Javier Escalera Reyes, ha realizado un diagnóstico participativo de la realidad social de las zonas, así como un Plan de Acción que va a favorecer en el futuro la integración de los nuevos pobladores.
Este trabajo de investigación, presentado esta mañana en forma de publicación, se completa con un modelo matemático elaborado por el Grupo de Investigación en Dirección de Empresas Asistida por Ordenador (GIDEAO) de Sevilla, que a través de información de carácter cuantitativo y cualitativo va a permitir la simulación de comportamientos de los sistemas sociales y urbanísticos, una herramienta de trabajo que puede ayudar a los gestores públicos locales a anticipar y armonizar la integración de los nuevos habitantes en sus respectivos municipios.
La presión metropolitana en la comarca Aljarafe-Doñana
Según se desprende de los trabajos de investigación urbanística y sociológica realizados en varios municipios de la comarca Aljarafe-Doñana, en este territorio no existe una manifestación visible de problemas de integración de los nuevos pobladores que pueda traducirse en conflictos, aunque los expertos consideran necesario prever acciones futuras para facilitar dicha integración y cohesión social.
Desde el punto de vista urbanístico, el estudio comarcal recoge varios aspectos que las distintas administraciones deben tener en cuenta en sus planeamientos con el fin de lograr una ciudad sostenible, subrayando la necesidad de poner freno a la proliferación de las tipologías urbanísticas imperantes en los últimos años.
Estas tipologías, fundamentalmente conformadas por viviendas unifamiliares, de baja densidad, monofuncionales y desvinculadas de los cascos históricos, suponen además un alto consumo de suelo y energía, y plantean problemas de movilidad, debido a la ineficiencia de los transportes públicos, prácticamente inexistentes en cuanto a la interconexión municipal e intermunicipal en la comarca Aljarafe-Doñana.
El estudio también destaca el protagonismo que en la última década ha tomado el coche en la fisonomía urbana de la comarca, saturando las calles y dificultando el tránsito al peatón. Asimismo, indica que es necesario arraigar a los nuevos pobladores en las zonas rurales de acogida, para evitar la creación de pueblos dormitorios. Para ello, apuesta por llevar a cabo acciones de integración positiva, muchas de ellas planteadas por los ciudadanos que han participado en los foros de trabajo organizados en la comarca por el grupo de trabajo de la Universidad Pablo de Olavide.
En el proyecto “Integración de Nuevos Pobladores en las zonas rurales afectadas por las áreas metropolitanas” han participado los Grupos de Desarrollo Rural de Aljarafe-Doñana, Gran Vega y Corredor de la Plata, en Sevilla, la Axarquía en Málaga, Alfanevada y Promovega en Granada, y Condado de Huelva, bajo la coordinación de la Asociación para el Desarrollo de la Comarca Aljarafe-Doñana.