Las posibilidades turísticas de nuestra comarca son infinitas y muy atractivas. La conjunción de valores naturales y culturales, una ubicación geográfica privilegiada (a pocos kilómetros de Sevilla), y su carácter eminentemente rural, de lugar donde se conservan tradiciones, fiestas, olores y sabores añejos y una forma de vivir muy apegada a la tierra, conforman un cóctel irresistible para el visitante.
Al potencial natural de la comarca, abanderado por el Espacio Natural de Doñana, hay que añadir un rico legado cultural y patrimonial, fruto de siglos de historia y de la influencia de las múltiples civilizaciones que a lo largo de los siglos se fueron asentando en el territorio. Pero no menos interesante es el capítulo etnológico y la propia idiosincrasia de las gentes que habitan estas tierras, caracterizadas por su sencillez y saber vivir.
En definitiva, el Aljarafe-Doñana es un territorio que envuelve y cautiva al turista, cargado de contrastes y posibilidades, que brinda un sin fin de sugerencias, que van desde el turismo de naturaleza, al gastronómico, el religioso o el cultural, además de un amplio abanico de oportunidades para la práctica del ocio relajado o activo.
Mención especial merece un turismo emergente y de gran potencial en la comarca, el ornitológico, que está poniendo en valor una de las mayores riquezas del territorio, su avifauna. Así, no es difícil encontrar por los espacios naturales de la comarca un número cada vez mayor de viajeros amantes de la ornitología (principalmente británicos, alemanes, franceses y portugueses, aunque tampoco hay que despreciar el turismo de naturaleza español) que llegan al Aljarafe-Doñana seducidos por las posibilidades que esta tierra ofrece para la observación de aves.
En relación al patrimonio artístico y arquitectónico, se aprecia más en las calles que en el interior de los museos, aunque también puede encontrarse alguno de gran singularidad, como el Museo Pickman de la Cartuja de Sevilla en Salteras. No obstante, con tan sólo dar un paseo por cualquiera de los municipios de la comarca, puede disfrutarse de su tesoro cultural, típicamente rural y visible en casas, haciendas, plazas y calles.
La comarca es además rica en arquitectura religiosa, que incluye desde pequeñas capillas a grandes colegiatas, pasando por multitud de iglesias y ermitas. Gran parte de estos monumentos son de dos épocas de gran florecimiento del arte y la cultura en la zona, el mudéjar (en los siglos XIV y XV) y el barroco (siglo XVIII). Sin embargo, las haciendas son el tipo de construcción rural más interesante de nuestra zona.
La cultura de nuestro territorio queda patente además a través de su popular y centenaria artesanía. Muchos usos artesanos están vinculados al espacio natural (Doñana y la ribera del Guadiamar), como la guarnicionería, la creación de esencias naturales, la construcción de chozas marismeñas o la gastronomía. Otras actividades tradicionales están relacionadas con el ciclo festivo del territorio, como la artesanía flamenca y sus accesorios (trajes de flamenca, botos, sobreros, carruajes, etc.), y en muchos de los pueblos de la comarca es muy representativa la tradición del bordado del mantón de manila. Asimismo, existe una serie de usos artesanales relacionados con la Semana Santa, como la imaginería, la construcción o recuperación de pasos, los bordados en oro, etc.
El Aljarafe-Doñana es también una tierra rica en tradiciones festivas. Una de las más importantes es la Romería del Rocío, que se vive con gran intensidad en un territorio que vio nacer algunas de las hermandades del Rocío más antiguas y señeras. El paso de los rocieros por la comarca la convierten cada primavera en centro neurálgico del marianismo mundial, creando estampas rocieras imprescindibles, como el paso del Vado del río Guadiamar a la altura del Quema (Aznalcázar) o el paso de Hermandades por Villamanrique de la Condesa, ambas calificadas como Fiestas de Interés Turístico de Andalucía.
Otra festividad muy arraigada en la comarca es la Semana Santa, que se vive con devoción en todos los municipios. Las ferias, romerías y otras celebraciones, conforman un calendario festivo lleno de acontecimientos.
Por último, haremos mención de nuestra gastronomía, que tiene su origen en algunos de los pueblos que durante siglos nos acompañaron, como los musulmanes, de quien hemos heredado gran parte de la tradición repostera. Otra parte de la artesanía culinaria del Aljarafe-Doñana está necesariamente ligada a los recursos naturales que ofrece desde tiempos inmemoriales el Espacio Natural de Doñana.